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El tiempo en Milán se caracteriza por ser cambiante y extremo según la estación del año. En las temporadas de verano, las temperaturas pueden ascender hasta los 40°C. En invierno el termómetro baja tanto que incluso puede llegar a nevar.

¿Cuándo viajar a Milán?

Si estás pensando en viajar a Milán, a continuación verás cuál es la mejor época del año para viajar a la capital de la moda.

Verano

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El verano en Milán comprende los meses de junio y agosto. Entre estos meses, la ciudad es calurosa, llegando hasta ser sofocante en ocasiones. Durante el día, la ciudad suele estar bastante desierta.

No es la época más recomendable para viajar a Milán. Las temperaturas pueden superar los 40º C en el día y la ausencia de costas dificulta las corrientes de aire.

Si aún así decides hacerlo, te recomendamos refrescarte en uno de sus lagos cercanos, como famoso el Lago de Como.

Invierno

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El invierno en Milán suele alternar entre días de bajas temperaturas y mucha humedad, con temporadas más suaves y secas.

Si bien no suele nevar con demasiada frecuencia, las temperaturas rondan entre los -2°C. y los 9°C. La temperatura máxima media suele ser de 6º C.

En el lado positivo, viajar a Milán en diciembre tiene su recompensa, ya que las calles se llenan de decoraciones navideñas, luces, gente y color. Si no te molesta el frío, es una época preciosa para conocer Milán.

Primavera

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Sin lugar a dudas, la primavera es la mejor época para visitar Milán. En especial si se trata de los meses de abril y mayo, cuando las temperaturas medias máximas oscilan entre los 17º y 22º C.

La primavera es la época más animada en la capital lombarda. Las terrazas en los bares y restarantes del Centro Histórico y los Navigli están a rebosar y la ciudad se llena de color.

Otoño

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Después de la primavera, otoño es un mes genial para explorar Milán. Los meses de septiembre y octubre son los mejores de lejos, ya que las temperaturas son suaves (una media máxima entre 24º y 18º C), perfectas para patear los barrios de la ciudad y sus monumentos sin ajetreo.

Es también la época para disfrutar de los colores del otoño. Para ello, el mejor sitio es el Parque Sempione, donde además de la naturaleza otoñal, tienes atractivos como el Castillo Sforzesco y la Torre Branca.